¿Qué como en Navidad? Consejos para planificar los menús navideños saludables

Ya se acercan las Navidades y con ellas, las reuniones familiares en torno a una mesa con gran cantidad de comida y bebida. En estas fechas se suele comer de más y la mayoría de veces con elección de alimentos poco saludables. Son días en los que olvidar las rutinas y las dietas, días para permitirse caprichos y hacer excesos.

Sin embargo, no es obligatorio comer de más ni todo lo que se coma tiene porque ser insano. Disfrutar de las comidas en estas fechas y cuidar la alimentación se puede compaginar, puesto que no es una tarea tan complicada. Comer rico y saludable no es difícil, solo se deben tener en cuenta algunas claves.

Actualmente, se plantean las Navidades extremadamente pronto, puesto que es posible encontrar en los supermercados turrones, mazapanes y bombones desde Octubre y alargarlo durante semanas o incluso meses. Esta situación comporta que se adelante el consumo de este tipo de alimentos, haciendo un consumo excesivo, ya que no se limita a los días festivos. Además, durante las festividades, se suelen cocinar grandes cantidades de comida, lo que provoca que se coma más de la cuenta o de lo que uno está acostumbrado. Estas situaciones conllevan malestar digestivo y general, con síntomas como reflujo, gases o digestiones lentas.

¿Cómo podemos controlar esta situación?

Una solución, sería pensar y plantear lo que realmente se va a comer durante estas fechas y equilibrar los menús para no hacer excesivos abusos.

Es interesante incluir una base de verduras u hortalizas en los platos, tanto en los principales, como en las guarniciones. Son alimentos muy versátiles y saciantes, que cocinados de forma correcta aportan pocas calorías. Acompañar con proteínas de calidad como legumbres, carnes magras, pescados o huevo.

En cuanto a los aperitivos, no optar por fritos y rebozados, embutidos o patés. Hay infinidad de alimentos ricos y poco calóricos que puedes incluir como gambas, ahumados, vegetales en conserva o patés vegetales con crudités.

¿Y el postre? Se puede optar por postres en los que la fruta sea la protagonista o los turrones caseros.

El alcohol también es un gran protagonista en las celebraciones navideñas. Es importante controlar su consumo, por los inconvenientes que ocasiona en la salud y su alto aporte de calorías.

Para evitar el aumento de peso a causa de los excesos navideños, un método muy utilizado entre la población es compensar, ya sea ayunando los días previos o haciendo dietas muy restrictivas. Estos métodos son un tanto peligrosos, pues se pasa en un periodo de tiempo muy corto de excesos sin control a restricciones calóricas muy pronunciadas. Esta situación no es ni mucho menos efectiva y provoca efecto rebote ganando incluso más peso.

Además, esta práctica puede acarrear efectos psicológicos negativos, puede derivar en trastornos de la conducta alimentaria o generar ansiedad y malestar general al enfrentarse contra el hambre natural. Las restricciones excesivas pueden desarrollar un descontrol alimentario, incluso fomentando que se coma demás cuando uno se lo permite.

Lo importante sería mantener una relación saludable con la comida durante todo el año y no optar por los excesos y las compensaciones. Es más fácil y saludable disfrutar en la mesa sin obsesionarse.

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