Día Mundial de las Abejas

Las abejas y otros polinizadores, como las mariposas, los colibríes o los murciélagos son indispensables para la conservación de la biodiversidad. Su trabajo como polinizadores es fundamental para preservar la supervivencia de los ecosistemas y esencial para la producción y reproducción de muchos cultivos y plantas silvestres, tanto así que el 90% de las plantas con flores, el 75% de los cultivos alimentarios y el 35% de las tierras agrícolas mundiales, dependen de la polinización para reproducirse.

Los polinizadores no solo contribuyen directamente a la seguridad alimentaria, sino que además nos avisan de los riesgos ambientales, indicando la salud de los ecosistemas locales. 

Pero, aunque las abejas sean tan importantes para el desarrollo y progresión del planeta, están cada vez más amenazadas por los efectos de la actividad humana. Son varios los factores que amenazan a las poblaciones de abejas en el mundo. Entre los conocidos, los pesticidas, los insectos invasores, los cambios en el uso de la tierra, los monocultivos que reducen los nutrientes o el cambio climático. 

Es importante llamar la atención de la población mundial sobre la protección de las abejas, puesto que el desarrollo del planeta depende de las abejas y otros polinizadores. La preservación de los polinizadores contribuirá a la detención de la pérdida de la biodiversidad y la degradación de los ecosistemas.  

Además, las abejas no solo ayudan al planeta con la polinización de plantas sino que con su trabajo proporcionan al hombre diversos productos que poseen muchos beneficios para la salud, como serían la miel, la jalea real, el polen o el propóleo.

La miel es el producto más conocido de las abejas. Aporta propiedades energéticas y vigorizantes, además de desinfectantes y cicatrizantes. Contribuye a realizar la digestión y es adecuada frente a los síntomas de cuadros gripales. 

La jalea real es el alimento de las abejas reina, siendo un néctar con excelentes propiedades para la salud. Aporta beneficios de mejora de la circulación sanguínea, por su acción vasodilatadora y así ayudando a controlar los parámetros sanguíneos. 

El polen posee propiedades antiinflamatorias y analgésicas y es ideal para las personas que sufren cansancio y astenia. 

El propóleo posee acción analgésica y antibacteriana, adecuado para mejorar los síntomas de procesos catarrales y el dolor de garganta.

Es por todo ello que debemos cuidar y salvar a las abejas, ya que sin ellas no podríamos conservar la biodiversidad. 

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