Vuelta del verano
Termina la época de verano que está asociada al descanso y las vacaciones. Hay tiempo para todo: para viajar y llenar los días de descanso de actividades, planes, excursiones, visitas culturales, deporte, experiencias gastronómicas y también para aprovechar para tumbarse a disfrutar de una buena lectura, de la música, el mar, la playa, la piscina, los paseos al atardecer y las cenas íntimas a la luz de las estrellas y la luna. Volver a la rutina no es fácil, así que apunta nuestros consejos para volver saludablemente:
- Recupera tus hábitos de sueño días antes.Será algo complicado, porque en vacaciones cambiamos nuestras rutinas de sueño olvidando el despertador… Recomendamos regresar poco a poco a los horarios habituales unos 3 o 4 días antes de la vuelta.
- El primer día de trabajo, ponte al día con calma. Lee con detenimiento todos los correos, pedidos, cartas, solicitudes que tengas acumulados, ordénalos por prioridades para poder gestionarlos y ¡sin agobios!
- Regresa a tus rutinas de ejercicio.Retoma tus clases preferidas, sal a andar aprovechando aún el buen tiempo, vuelve a tu gimnasio… Todo poco a poco, comienza con 30-40 minutos y ve incrementando el tiempo hasta que vuelvas a tu rutina habitual.
- Vuelve a tu alimentación habitual. Cuando estamos de vacaciones solemos consumir alimentos con muchos azúcares y grasas saturadas, por lo que es importante regresar a una dieta saludable paulatinamente. Primero elimina los alimentos con calorías vacías y aumenta la cantidad de alimentos saludables buscando recetas diferentes.
- Date un descanso.Aunque parezca contradictorio, una de las fórmulas más efectivas para regresar a la rutina de forma saludable es intentar saltársela un poco. La motivación de tener planes interesantes nos hace más llevadera la vuelta, así que disfruta de las tardes de verano al aire libre y haz planes tras la jornada laboral.
- Complementa tu dieta. Si necesitas ayuda con los nuevos propósitos o incluso si tu alimentación se ve comprometida en valores nutritivos puedes buscar en tu tienda de productos naturales aquello que necesitas: Omega 3, Ginseng, Propóleo, Hechinácea, Melatonina, Hipérico, Avena, Maca, Vitamina D, Vitaminas Grupo B y por supuesto rehidratar la piel con Aceites, Aloe Vera, Prebióticos, Silicio, Colágeno.
Sigue estas recomendaciones y verás cómo es más sencillo de lo que piensas 😊